Aner Ansorena es consultor digital y experto en comunicación municipal. El fundador de la empresa HAUDA analiza desde su experiencia como jefe de gabinete de varias alcaldías la importancia de la comunicación como herramienta transformadora y necesaria en los pueblos.
La pandemia ha traído consigo un cambio de paradigma en casi todos los sectores y ha acelerado los motores de transformación en las ciudades y en nuestros pueblos. Uno de ellos, es el motor de la comunicación como herramienta para que las administraciones mantengan y sigan desarrollando esa relación tan directa y ágil que han tenido durante la crisis sanitaria. «Siento decirlo pero hay muchos ayuntamientos que necesitaban esta pandemia para darse cuenta que no tenían línea directa con las personas que viven en sus municipios. Los ayuntamientos con los que trabajamos están comunicado más que nunca y han aumentado las interacciones con la ciudadanía, enriqueciendo de una manera notoria no sólo la comunicación sino también su propia gestión. Contar con información real, inmediata y ‘de primera mano’ hace que la toma de decisiones sea mucho más acertada», apunta Ansorena.
EL MUNICIPALISMO MÁS PARTICIPATIVO Los ayuntamientos se encuentran ante un gran reto, han pasado de solo gestionar y «hacer» a tener que contar lo que hacen. Ahora sus habitantes quieren ser parte activa de lo que sucede en sus pueblos, quieren participar en la toma de decisiones. Este nuevo cambio es algo positivo, ya que demuestra interés y puede ser utilizado para conseguir que sean más atractivos para vivir en ellos.
La administración local es la más cercana a la ciudadanía y, sin embargo, es la que menos información traslada. Quizá esto se vea agravado porque es también la que menos recursos económicos destina a estas tareas. «Históricamente no existía la necesidad de comunicar nada en el pueblo, ya que con un comentario en el bar o en la panadería todo el mundo se enteraba. Ahora es muy diferente, las instituciones deben hacer un gran esfuerzo comunicativo. Tenemos miles de canales para llegar a la ciudadanía y eso dificulta y hace que sea necesaria la profesionalización de la comunicación», explica Aner.
«El ayuntamiento tradicionalmente informaba a través un bando, pero ahora ese bando se debe adaptar a un tweet, a una story en redes sociales, una cuña por la radio, un mensaje de WhatsApp€ Los ayuntamientos deben entender que la comunicación no es contar únicamente lo que ellos quieren sino que esta comunicación debe convertirse en una conversación con sus ciudadanos y ciudadanas, es decir, que también se les escuche».
LA COMUNICACIÓN COMO HERRAMIENTA DE GESTIÓN Los ayuntamientos tienen una gran oportunidad de mejorar su gestión si utilizan la comunicación con la ciudadanía como información necesaria para tomar mejores decisiones, así como para contar qué decisiones han tomado y por qué lo han hecho. Para ello, claro está, es necesario destinar recursos a esta tarea y olvidarse de la errónea idea de que la comunicación municipal es publicidad pura y dura.
Las estrategias, hoy en día, deben ir dirigidas a quien recibe el mensaje. Esforzarse en contar qué y cómo están sucediendo las cosas crea lazos, crea conexiones con las personas y se convierte en la mejor manera de poder hacer que nuestros pueblos sean más amables y, sobre todo, lugares donde sentirse «parte de».
La enrevesada y larga tramitación que exigen muchos proyectos hace necesario un trabajo de divulgación para dar a conocer esa gestión de una forma amena y atractiva en la que la transparencia sea el centro. «Tenemos que planificar una estrategia de comunicación. Debemos conocer los intereses y necesidades que tienen los ciudadanos y enfocar las acciones a ese público concreto. Además, las instituciones, en general, deben hablar el mismo idioma que las personas en la calle, debemos adaptar los mensajes, simplificarlos. Por ejemplo, si queremos comunicar que se han cambiado las baldosas de las piscinas municipales y nos dedicamos a lanzar las 300 páginas del pliego de actuación, lo único que conseguiremos es que nadie lo lea porque, por muy transparente que sea el mensaje, habrá dejado de ser atractivo. Los ayuntamientos deben ser capaces de contar de una manera bonita y sencilla qué han hecho, cuánto ha costado y qué beneficios reporta y, para esto, se necesita tener a su lado un profesional de la comunicación», destaca Ansorena.
LUCHA CONTRA LA DESPOBLACIÓN La despoblación es uno de los problemas centrales de muchos municipios. Por eso, no hay que perder de vista ninguna acción que pueda parar este éxodo hacia la ciudad y, para ello, los ayuntamientos deben conseguir pueblos atractivos, mostrarlos como lugares para vivir.
Aner Ansorena está convencido que con una buena estrategia se puede paliar esta amenaza. «Nuestra empresa lo primero que hace es diagnosticar el problema y establecer un objetivo claro: hacer más atractivo el municipio con el que trabajamos. Nos basamos en la premisa de que los pueblos lo primero que necesitan es ‘movimiento’, pero antes necesitamos crear ‘marca de pueblo’. Lo hacemos a través de nuestra riqueza cultural, nuestra ubicación, etc., buscamos el punto fuerte de la zona», señala.
Una vez enfocado el objetivo el consultor explica que desarrollan distintas estrategias para conseguirlo «porque cada zona y cada pueblo son singulares y necesitan cosas distintas. No podemos utilizar la receta de ‘café para todos'». Y añade que lo que siempre tienen claro es que esta comunicación es bidireccional: «por una parte trabajamos con el objetivo de reconocimiento de marca y, por otra, en la comunicación con la ciudadanía como gasolina para que este motor funcione».
EN PRIMER PLANO
Hauda comunicación nace en 2016 en Lekunberri con la intención de revolucionar el mundo de la comunicación institucional. Su equipo utiliza el poder transformador de la comunicación como herramienta básica para generar sociedades más conectadas.
Actualmente, trabaja con nueve ayuntamientos, en cuatro de ellos viviendo el día a día y en los otros cinco en momentos puntuales, pero en todos ellos trabajando la comunicación como un canal bidireccional donde enseñar a los ayuntamientos a no centrarse solamente en el «hacer» sino en comunicar «qué es lo que están haciendo». A través de la metodología CON ayudamos a instituciones, ayuntamientos y políticos a llegar a más personas y de una manera profesional.